El embrollo turco II (Erdogan vs Gülen)

Ya habíamos situado una de las claves del embrollo turco en la lucha incesante entre la laicidad del Estado que trajo Kemal Atatürk a la nueva República en su fundación, el papel garante del ejército a lo largo de los años y el resurgimiento de las tendencias islamizantes en la sociedad turca del siglo XXI. (El embrollo turco I). 

 Pero ahora es necesario detenerse en lo que está pasando dentro de los islamistas y entre las facciones que lideran por una parte Recep Tayyip  Erdogan y por otra el imán y empresario exiliado en USA, Fethullah Gülen, un hombre que ha creado un imperio basado en la educación y que esta detrás de la construcción de escuelas secundarias y universidades y de miles de residencias universitarias a lo largo y ancho de todos los paises musulmanes del planeta y también en otros países mayoritariamente cristianos como los Estados Unidos.
El Islam gülenista es un islam moderado, que acepta sin dificultad la convivencia con otras religiones monoteistas, incluyendo a las tendencias musulmanas no suníes, y que está en contra de utilizar cualquier tipo de violencia en nombre de la religión y contra otras religiones. Pero el gülenismo encierra en su doctrina un caballo de Troya, ya que permite lo que el imán llama "La Taqiya" el ocultamiento permanente y el engaño sistemático, para que sus seguidores no sean detectados y puedan escalar en los puestos de la educación, la burocracia y el ejército turco. Esta norma se puso en marcha para evitar las medidas laicistas que en su día implantó Kemal Atatturk, y que impedían vestir el velo islámico para acceder a las Universidades o hacer profesión de fe para poder acceder a puestos en la administración del Estado o en elejército. Gracias a la ocultación, que no está permitida en otras concepciones de la religión musulmana, los partidarios de Gülen han ido en las últimas décadas penetrando sistemáticamente todas las instituciones turcas, para subvertir el laicismo radical del fundador de la república. La ausencia de plazas y la carestía de los alojamientos en los colegios universitarios fue la carencia crónica del sistema educativo turco, que empujó la plataforma del gülenismo para poder, gracias al ocultamiento, ir introduciendo los principios islámicos en la hasta entonces inexpugnable muralla laica, que protegía la separación de Iglesia y Estado en Turquía.

                                                                 Fetuhllah Gülen

Erdogan es un hijo de inmigrante georgiano llegado a Estambúl con 13 años, y que a pesar de su título "honoris causa" recibido en Madrid, no es un presidente especialmente cultivado. Políticamente es un populista que representa una rama mucho más radical del Islam y que presenta tintes machistas y autoritarios claros. Son famosas sus declaraciones contra las mujeres solteras, de las que afirma son mujeres incompletas, o sus afirmaciones sobre que las mujeres no son iguales a los hombres Su populismo aglutinante en torno a la religión, como parte fundamental de la  identidad turca, se une a una concepción de credo estrictamente suní como único autorizado dentro del Islam, de manera que es éste y no otro, el credo el que debe extenderse por el mundo, hasta convertir a todo el planeta a la verdadera fe, utilizando la educación como medio, cerrando las escuelas laicas y justificando incluso el uso de la violencia para esos fines.

El matrimonio de conveniencia entre el Gülenismo y el Erdoganismo viene de lejos, ya que la doctrina del ocultamiento, permitió a los seguidores de Gülen impulsar desde su penetración en las estructuras del Estado, cambios contínuos que fuesen erosinando sistemáticamente los principios laicistas del kemalismo. Esta colaboración se redobla a partir de 2002 cuando se permite por primera vez la llegada al poder de un partido como el AKP de Erdogan de marcado caracter islamista, sin que sea disuelto por el ejército. Son entonces los partidarios de Gülen, infiltrados en las instituciones turcas, los encargados de ir poniendo en marcha los postulados económicos, educativos y sociales de un Estado que abandona progresivamente el laicismo para dejarse caer en las manos nuevamente del islam.

Este matrimonio de conveniencia ha llegado a su fin y ahora Erdogan, envalentonado por la incapacidad del ejército para mantener la ortodoxia laicista del fundador de la República, se dispone a tomar cumplida revancha del antes colaborador, luego adversario exiliado y ahora enemigo acérrimo Fethullah Gülen.
Son estas las razones del aparentemente desmesurado actuar de Erdogan, al realizar esas detenciones masivas en todos los estamentos del Estado turco, ya  que conoce perfectamente hasta dónde habían llegado las técnicas de ocultamiento y de penetración de los seguidores de Gülen, en el entramado de las instituciones turcas.
Esta es una historia de como una alianza de dogmáticos ha subvertido la separación de la Iglesia y del Estado y ha retrotraído a Turquía a los tiempos califales anteriores a Atatürk. Las consecuencias que esta deriva va a tener para Europa, para la miópe Europa serán visibles en un futuro no muy lejano. Erdogan se acerca a Putin y prepara su ataque a los Kurdos mientras se dedica a jugar con la débil UE en base a los acuerdos de inmigración que sabe son el gran talón de Aquíles de la política europea.

                                                                                                Donostia Agosto 2016
                                                                                                              IZ