Memoria Histórica de Altuna nº 15. Willy Koch
- Willy KOCH SCHOENEWEISS (Goethe)
Este artículo permite recorrer las diversas fases del proceso de venganza que se llevó a cabo contra los masones. Establecimiento de la condición de masón, denigración de la persona, humillación a través de la retractación y sentencia.
Nacido en
Ohligs, provincia del Rhin en Alemania el 5 de Junio de 1878 era
propietario de la tienda de fotografía de la Avenida muy conocida y
de solera. Casado y cónsul de Alemania en San Sebastián en la época
republicana estaba domiciliado en 1942 en la Calle Mayor nº 6 2º
derecha y en 1948 en la Calle Manterola 3-3º.
Del
expediente de Willy Koch se obtuvieron cuatro fotocopias.
La
primera fotocopia es muy interesante. Se trata
de un escrito de la Logia Progreso 289 de San Sebastián dirigida al
Consejo Supremo del Grande Oriente Español en Madrid. Esta fechado
en San Sebastián el 28 de Diciembre de 1907 y quienes lo firman son
el VM Angel Digón (Saulo) grado 33 y el secretario (Giordano Bruno)
que posteriormente descubrimos que era Martín Heredia y que aparecerá también
entre los miembros de Altuna nº 15, Por este escrito conoce la Policía la pertenencia de Willy Koch a la masonería.
La
segunda fotocopia es también muy interesante
y se trata de un certificado de Altuna 15 diciendo que “ fue
iniciado en el grado de compañero masón en sesión del 4 de Junio
de 1932. Willy Koch
accedió al grado de Maestro en Diciembre del mismo año 1932
Hay un
escrito del Gobernador Militar de Guipúzcoa fechado el 16 de abril
de 1937 relativo a Koch que dice “ Es indeseable para España por
ser de tendencia izquierdista – nacionalista”. Añade que los
miembros de Altuna “huyeron a la entrada de nuestras tropas por
estar todos afiliados a partidos contrarios a nuestra causa o
participar de ideas extremistas, pudiéndose afirmar que son
anticatólicos por esencia, propicios a las ideas
regional-separatistas (vascas, catalanas , gallegas) y aún
amparadores, por lo menos moralmente, de toda idea que represente
lucha contra la unidad española. No es ningún secreto para nadie
que los miembros de esta logia profesan ideas disolventes”.
Este documento nos permite entender cómo el régimen inicia su venganza contra los masones atribuyéndoles todos los males del país y despreciándoles como personas.
Willy Koch
huyó al extranjero al entrar las tropas franquistas, pero volvió al
poco tiempo reabriendo la tienda y levantando el acta de incautación.
Un papel judicial o policial de la época dice “ tiene protección
del Jefe de Policía Sr. Aparicio de dudosa condición”.
La tercera
fotocopia se refiere a su declaración ante
los jueces de fecha 9 de septiembre de 1942 (Año de la Alemania
triunfante) donde se dice “que no ha sido procesado” y de la que
transcribimos el grueso de su declaración. “manifiesta que ingreso
en la masonería en la Logia Altuna de San Sebastián con el nombre
simbólico de Goethe en el año 1932. No desempeñó cargo
alguno y llegó a ser grado 3º Maestro Masón. Hacia 1934 en una
carta pidió la baja en la Logia porque se habían vertido frases
injuriosas contra su patria y contra el Fhürer, terminándose así un
proceso de separación causado por su propia nacionalidad ya que el
Jefe del estado alemán había disuelto las logias y él mismo se
encontraba obligado a defender el régimen nacional frente a las
ideas generales en la logia, que tampoco estaban de acuerdo en
materia religiosa por atacarla de manera general fundándose en
ciertos principios filosóficos agregado esto a las continuas
discordias habidas entre ellos y al haber encontrado en la Logia
falta de sustancialidad y un carácter poco formal. Le contestaron a
esta carta manifestándole que debía pedir la baja a Madrid y no
recibió nunca este documento ya que no tenían planchas adecuadas
para acceder a lo solicitado. Conservo esta carta algún tiempo y ha
desaparecido con otros documentos debido a la conmoción general. No
presentó retractación pero debe hacer constar que fue objeto de un
expediente en la Embajada de su país, donde tiene completamente
solucionado este asunto y ha sido objeto recientemente de una acción
que califica de indigna, cometida por un tal Barrenechea, propietario
de una droguería sita en la calle Andía, por cuanto este individuo
ha entregado públicamente una fotocopia del título de compañero
masón que le fue expedido al declarante cuando fue iniciado con este
grado en la logia Altuna y estima que no puede quedar el documento en
semejantes manos, porque el que se ha separado de la masonería,
aparecerá siempre y sin oírle, como masón en cuanto Barrenechea
quiera seguir haciendo público”..
“Fue
llevado a la masonería por casualidad tal como puede verse en el
hecho ocasional de su ingreso pues leyendo en el Ateneo de San
Sebastián una obra bilingüe acerca de la evolución masónica de
Goethe se le acercó un individuo de origen gallego llamado Isaac y
posiblemente de ascendencia judía, y comprendiendo el interés del
declarante por conocer la masonería de la que había oído hablar le
ofreció llevarle a la Logia como lo hizo. Asistió frecuentemente
porque se trataba de cuestiones filosóficas que le agradaban, más
tarde mezclaron cuestiones políticas y él indiferente en cuanto a
cuestiones de gobierno fue siempre opuesto a un régimen republicano
de izquierdas.
Que recuerda
como asistentes a la Logia al señor Doporto, jefe del Observatorio
de San Sebastián, un tal Tebar, aproximadamente de la edad del
declarante, empleado de Aduanas, uno que fue expulsado, es decir se
le hizo expediente de expulsión, Arquitecto de San Sebastián.
Durante la guerra ha prestado continuos servicios a la causa Nacional
Española según probará con copias de los documentos”.
La cuarta
fotocopia es la sentencia judicial contra
Willy Koch fechada el 29 de Octubre de 1942, o sea, a los dos meses
escasos de la declaración antes citada. Está firmada por cuatro
excelentísimos señores, el general Saliquet como presidente del
tribunal y como vocales, González Oliveros, General Borbón y
Pradera.
La sentencia
dice “ que si bien alega haber sido baja en el año 1934 no hay
constancia oficial de este extremo. No presentó retractación. Desde
su puesto de Cónsul de Alemania, favoreció a personas perseguidas
por los rojos, si bien utilizando su condición de extranjero
entorpeció la labor antimasónica que se había impuesto el
Gobernador Militar de San Sebastián. Considerando que en la comisión
del delito no son de apreciar circunstancias modificativas de la
responsabilidad criminal y procede imponer la menor de las penas de
las que señala el art. 5 de la Ley y en su grado mínimo.
Considerando que…el Tribunal teniendo en cuenta la condición de
súbdito alemán del encartado y las disposiciones… en cuanto a
extranjeros, propone respetuosamente al gobierno la conmutación de
la pena impuesta por la expulsión del territorio nacional, acordando
también en lo que esta petición tarde en resolverse, colocar al
condenado en situación de prisión atenuada en su domicilio bajo la
vigilancia de las autoridades.
Fallamos : Que debemos condenar y condenamos al procesado Willy Koch Schoeneweiss como autor de un delito consumado de masonería sin la concurrencia de circunstancias modificativas de la responsabilidad criminal a la pena de doce años y un día de reclusión menor y accesorias legales de inhabilitación absoluta….”.
Donostia Abril de 2015
IZ
Fallamos : Que debemos condenar y condenamos al procesado Willy Koch Schoeneweiss como autor de un delito consumado de masonería sin la concurrencia de circunstancias modificativas de la responsabilidad criminal a la pena de doce años y un día de reclusión menor y accesorias legales de inhabilitación absoluta….”.
Donostia Abril de 2015
IZ
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